domingo, 12 de junio de 2016

Baila!

"La vida es un gran baile, y el mundo es el salón". Vivir no consiste en pasarnos el tiempo aprendiendo a bailar, no se trata de pretender encontrar los mejores trucos, los mejores pasos de baile, la mejor coreografía capaz de sorprender a todos los ojos que brillan en la habitación. Se trata de mover los pies, de intentar no perder el  equilibrio, de dejarte conquistar por la música, de hacerlo sencillo, de hacerlo con ritmo o sin él, de hacerlo muy tú y sin más. Consiste en soñar con los pies y sentir la libertad en cada extremidad de tu cuerpo.
La vida no te hace experto en danza, pero te invita a disfrutar de la música, de esa música que se convierte en la banda sonora de tu existencia más armoniosa. Cualquier persona que se cruce en tu camino podría hacer cambiar el tono musical de tu baile, hacerte bailar a distinto compás, en distinto estilo. Cualquier persona que te haga latir a otra velocidad,  podrá enseñarte que aunque no siempre podamos elegir la banda sonora  de cada etapa de nuestra vida, si podremos elegir siempre el modo en qué bailarla.

Búscate una pareja de baile! Haz que tu corazón baile un ritmo compartido. Conviértelo en la nueva melodía del baile de las cosas sencillas. Conviértelo en el silencio arrítmico que vibra en el aire cuando la música del gran salón se toma una pausa para respirar.  Compartid la vida, la música y el baile. Y no os olvidéis de no invadir la baldosa sobre la que cada cual bailáis para no pisaros los pies. Haced de vuestro espacio en común un conjunto de notas orientadas a crear magia y arte.
Y  si en cualquier caso no encontraste tu pareja ideal, si tu arritmia corporal no se sincroniza con ninguna de las formas de bailar presentes en la sala, no te preocupes, la vida no entiende de canciones repetidas sino de aleatoriedad. Llegará tu canción, tu mejor  baile, y todos tus pasos se coordinarán tan bien que te verás fundiendo en acordes nuevos capaces de conquistarte el alma, redescubriendo entre todos aquellos que bailan, miradas que adivinan tormenta musical perfectamente entrelazada.

La vida como el bailar es expresar. Permítete ensayos y errores, no todos los bailes son el baile final. Permítete canciones lentas y tristes, no todas las canciones son canciones de sábado. Apuesta sin reparo  por renovar tus pasos, cree en ti, cualquier baile es el mejor baile si se siente desde dentro. Sedúcete también de bailes amargos, porque no se aprende nada cuando todas las canciones se bailan bien. Y ten presente que quizás la vida no sea la fiesta que esperábamos, pero que mientras estemos aquí deberíamos bailar. Así que si un día te despiertas y no sabes qué hacer con tu vida, haz algo: ¡BAILA!




No hay comentarios:

Publicar un comentario